El personal militar, preparado física y mentalmente, ha sido movilizado estratégicamente hacia ciudades clave como Guayaquil, Manta y Santa Rosa. Este lunes 18 de agosto, un contingente de 250 efectivos fue trasladado vía aérea, mientras que 1.300 soldados se desplazaron por vía terrestre hacia Esmeraldas, Carchi, Orellana, Sucumbíos, Loja, Los Ríos y otras provincias del país.
Esta operación de despliegue responde a la necesidad de reforzar la presencia militar en zonas críticas, con el fin de combatir y neutralizar amenazas latentes como el narcotráfico, la minería ilegal, el tráfico de armas, municiones y explosivos. El objetivo principal es reducir los índices de inseguridad, enfrentando de forma directa a los Grupos Armados Delincuenciales (GAO) y desmantelando sus estructuras para devolver la tranquilidad a la ciudadanía.
Los soldados recién graduados se destacan por su formación rigurosa, además, han recibido entrenamiento especializado en técnicas y tácticas de combate, operaciones en entornos urbanos y en selva, lo que les permite desplegarse de inmediato en cualquier operación militar en el territorio nacional.
La movilización ha sido coordinada minuciosamente para garantizar una respuesta rápida y efectiva en las diferentes áreas asignadas. Las operaciones militares se enfocarán en puntos estratégicos donde se ha identificado mayor actividad delictiva, buscando restablecer el orden y la seguridad.
Con este despliegue, el Ejército Ecuatoriano reafirma su compromiso de trabajar incansablemente por la seguridad de la población, combatiendo toda forma de actividad ilícita y apoyando a otras instituciones del Estado en la lucha contra el crimen organizado.