By En un rincón del Patronato de Amparo Social de Salcedo, la tierra cobra un nuevo significado. Entre surcos recién abiertos y manos arrugadas por los años, los adultos mayores han encontrado en la agricultura un espacio de conexión, propósito y bienestar. Bajo la dirección de Verónica Paz, presidenta del Patronato, este innovador proyecto de huertos no solo busca el autoabastecimiento, sino también la recuperación emocional y física de sus beneficiarios.
El huerto comunitario es más que un espacio de cultivo; se ha convertido en una terapia natural para los adultos mayores del centro. Diariamente, con el sol de la mañana, los residentes se acercan a las parcelas donde cuidan y siembran productos como hortalizas, plantas medicinales y pequeños frutales. La actividad, que inicialmente surgió como un complemento a las dinámicas recreativas del centro, ha demostrado ser una herramienta invaluable para su salud mental y física.
“Queríamos que nuestros adultos mayores tengan un motivo más para levantarse con energía, para sentirse útiles y activos. La tierra es vida, y ellos han encontrado en ella un espacio para recordar, compartir y sentirse parte de algo significativo”, explica Paz.
El trabajo en los huertos es supervisado por un equipo de profesionales que adapta cada tarea según las capacidades de los participantes. Aquellos con más movilidad se encargan de sembrar y regar, mientras que otros ayudan en la selección de semillas o en el cuidado de plantas en macetas. La idea es que cada persona encuentre su ritmo y disfrute del proceso.
El proyecto ha recibido el respaldo de diversas instituciones. La Universidad Técnica de Ambato (UTA) y la Escuela Politécnica del Ejército (ESPE) han firmado convenios con el Patronato para aportar con asistencia técnica y material. “Los estudiantes de agronomía y medicina trabajarán de la mano con nuestros adultos mayores, no solo enseñándoles nuevas técnicas de cultivo, sino también monitoreando su salud y bienestar”, señala Paz.
Además, los huertos han despertado el interés de voluntarios extranjeros, en su mayoría jubilados de otros países, quienes han visitado las instalaciones para conocer y apoyar la iniciativa. “Es admirable ver cómo los adultos mayores de Salcedo trabajan la tierra con tanta dedicación. En otros países, este tipo de proyectos son altamente valorados por sus beneficios terapéuticos, y es gratificante poder contribuir aquí con nuestra experiencia”, comenta un voluntario canadiense que recientemente se unió a la causa.
El impacto del proyecto va más allá de los resultados agrícolas. Según los testimonios del personal del Patronato, los adultos mayores han mostrado mejoras en su estado de ánimo, coordinación motriz y habilidades sociales desde que comenzaron a trabajar en los huertos. “Hay personas que llegaron aquí con cuadros de depresión, sintiéndose solas y sin motivación. Ahora, las ves regando sus plantas con alegría, conversando sobre qué van a sembrar la próxima semana. Es un cambio maravilloso”, menciona una cuidadora del centro.
Uno de los beneficiarios, don Manuel, de 78 años, relata su experiencia con entusiasmo: “Toda mi vida fui agricultor. Cuando llegué aquí, pensé que nunca más tocaría la tierra, pero este huerto me devolvió las ganas de seguir adelante. Ahora espero cada día para salir a ver mis plantas, para hablarles, para sentir que sigo siendo útil”.
Ante el éxito de la iniciativa, el Patronato busca expandir los huertos y diversificar sus cultivos. Próximamente, se implementará un área de producción de cuyes de raza, donde los adultos mayores podrán involucrarse en el cuidado y alimentación de estos animales, fortaleciendo aún más su sentido de pertenencia y responsabilidad.
También se está gestionando la creación de un pequeño invernadero, que permitirá mantener la producción durante todo el año y generar excedentes que puedan ser utilizados para el consumo interno del centro o incluso vendidos en pequeñas ferias locales. “Queremos que este sea un proyecto autosustentable, que les brinde una actividad recreativa, pero que también ayude a mejorar la alimentación de nuestros beneficiarios”, enfatiza Paz.
El Patronato ha lanzado la campaña “Salcedo Solidario”, con la que busca recolectar insumos para fortalecer el huerto y mejorar las condiciones de vida de los adultos mayores. Se hace un llamado a la ciudadanía para donar semillas, herramientas de jardinería, abono orgánico y materiales para la construcción del invernadero.
“Toda época es importante para compartir, y qué mejor manera de hacerlo que ayudando a nuestros adultos mayores a seguir cultivando vida. Este proyecto no es solo de ellos, es de toda la comunidad”, concluye Paz.
El huerto del Patronato de Amparo Social de Salcedo no solo ha dado frutos en la tierra, sino en la vida de quienes participan en él. Con cada semilla sembrada, los adultos mayores encuentran un motivo más para seguir adelante, recordando que nunca es tarde para volver a florecer.
