Los racionamientos eléctricos generan afectación y pérdidas en los diferentes sectores de la población, este rotativo conversó con varios emprendedores que tiene sus pequeños negocios y dicen sentirse afectados por los apagones, que comienza a generar pérdidas.
Magori Vaquero, quien se dedica a la elaboración de café de haba, producto que está dirigido aquellas personas que sufren de gastritis, nervios y puede ser consumido por niños, jóvenes, adultos y personas de la tercera edad, además, elaboran el té de higo y chocolates, la venta del producto lo realizan en las diferentes tiendas, además pueden encontrar en las diferentes ferias de emprendimientos.
Vaquero, dijo que por un lado la falta de lluvias afectado la producción del haba que ha subido su precio, a ello se suma la falta de energía que afecta la producción al momento de la molida y el enfundado, aquello ha llevado a cambiar el horario para la elaboración del producto, afectando la venta.
Jesenia Vera, tiene un local, en la cual se dedica a la venta de pan de yuca acompañado de un yogurt artesanal, su negocio inició hace dos años, el producto tiene gran acogida entre la ciudadanía, diariamente produce sobre los 400 panes que son vendidos entre las 10:00 hasta las 20:00, en su propio local; respecto a los apagones que está viviendo el país, dijo que la venta ha reducido un poco durante la noche, la atención lo realiza con focos linternas que ayuda a suplir la falta de energía.
María Isabel Toaquiza, dedicada a la venta de legumbres orgánicas en la ciudad, apuntó que su negocio en los últimos meses se ha visto afectada por la falta de lluvias para la producción de legumbres, lo que genera que los precios suban, apuntó que varios productos se han perdido por las heladas y la falta de agua, a ello se suma, que los apagones ha reducido las ventas por que, el negocio tiene que cerrar más temprano 18:00 cuando por lo general cerraba a las 20:00 o 21:00.
Pedro Maldonado, dedicado al cultivo de la miel de abeja, actividad que en los últimos meses, la producción ha reducido en un 60% debido a la falta de lluvias lo que no genera floración para la producción de miel a través de las abejas, para tratar de mantener los panales de abejas han tenido que migrar a sitios de la Costa en busca de floración para el mantenimiento de las colmenas, a ello se suma la falta de energía que está afectando en la elaboración de las productos en base a la miel de abeja.