La ciudad de Salcedo se apresta a recibir una renovada versión del tradicional redondel de la Madre, una de las obras simbólicas del cantón, que actualmente registra un avance del 85% y cuya entrega definitiva se prevé para mediados de agosto, con un diseño que combina elementos arquitectónicos modernos, vegetación urbana y una fuente luminosa, el nuevo redondel busca realzar la imagen urbana de la ciudad, fortalecer el sentido de pertenencia y brindar un espacio estéticamente atractivo.
El proyecto, liderado por la Municipalidad de Salcedo y ejecutado por la empresa contratista Brades, cuenta con un presupuesto referencial de 35 mil dólares, la intervención contempla una obra civil completamente nueva, salvo por el monumento de la Madre, que será restaurado y preservado como patrimonio. Según explicó el arquitecto Sebastián Atience, residente de obra de la empresa contratista, el contrato inicial contemplaba el derrocamiento total del antiguo redondel, el cual había recibido varias intervenciones superpuestas en el tiempo, sin un criterio unificado. “Lo que hicimos fue retirar todo y comenzar desde cero. La obra civil es nueva, aunque el busto se mantiene como elemento histórico”, detalló.
La renovación del redondel incluye elementos como bordillos prefabricados, adoquines ecológicos, cerámica tipo madera, bolardos con iluminación LED RGB y una fuente ornamental central con chorros de agua de doble altura, esta fuente ha sido diseñada para resaltar especialmente durante las noches, gracias a un sistema de luces programables que podrán mostrar diversos colores.
El redondel también contará con un anillo peatonal exterior que permitirá a los transeúntes bordearlo sin invadir el área central, preservando el monumento. En este sentido, el diseño contempla tanto la protección del patrimonio como la funcionalidad urbana. “No se podrá ingresar al centro del redondel precisamente para cuidar el busto y evitar el desgaste innecesario”, explicó el ingeniero Carlos Darro, jefe de fiscalización del GAD Municipal de Salcedo.
En cuanto al componente paisajístico, se están implementando nuevas áreas verdes que acompañan el trazado arquitectónico del redondel. Bryan Chávez, fiscalizador de la obra, explicó que “la vegetación es un elemento clave en esta renovación, pues embellece el entorno, mejora la calidad ambiental y complementa visualmente el diseño de piso en forma de flor que se ha aplicado”. La combinación entre el adoquín y el verde natural busca generar un equilibrio entre lo urbano y lo ecológico.
Durante la ejecución de la obra se enfrentaron algunos retos técnicos, especialmente relacionados con las acometidas para el sistema hidráulico de la fuente. “Tuvimos que intervenir parte de la calzada vehicular para instalar las tuberías necesarias. Esto generó algunas molestias en el tránsito, pero fueron trabajos indispensables para el funcionamiento de la fuente”, indicó Atience.
La mano de obra empleada en el proyecto proviene en su mayoría del cantón Salcedo, lo que generó empleo local y permitió dinamizar la economía del sector, a lo largo de las semanas, el equipo de trabajo ha ido variando de acuerdo a las etapas constructivas, concentrándose actualmente en los acabados finales.
Uno de los elementos que distingue esta obra de otras intervenciones similares es el mantenimiento posentrega que asumirá la empresa constructora durante seis meses, este compromiso incluye el funcionamiento de la fuente, la iluminación, los bolardos y el sistema eléctrico en general, con el fin de garantizar que todo opere correctamente antes de pasar la responsabilidad al Municipio.
El nuevo redondel de la Madre no solo representa una transformación estética del entorno, sino que también simboliza el esfuerzo por renovar espacios urbanos con enfoque patrimonial, funcional y sostenible. La ciudadanía salcedense espera con entusiasmo la entrega definitiva de esta obra que honra a la maternidad y revitaliza un punto estratégico de la ciudad.
Con la entrega prevista para las primeras semanas de agosto, las autoridades municipales reiteraron su compromiso con la regeneración urbana de Salcedo. Esta intervención se enmarca dentro de un plan más amplio que contempla obras similares en otras zonas del cantón, como parte de un proyecto integral de embellecimiento y funcionalidad del espacio público. “El redondel de la Madre es solo el inicio. Vamos a seguir transformando Salcedo con obras que reflejen el orgullo de nuestra gente”, concluyó el alcalde Juan Paul Pacheco.
La ciudad se prepara entonces para recibir con orgullo una obra renovada que conjuga historia, urbanismo moderno y una apuesta por el bienestar colectivo. Una muestra de que, cuando se planifica con visión y se ejecuta con compromiso, los espacios públicos pueden convertirse en verdaderos símbolos de identidad y desarrollo.