El fin de semana se volvió trágico para las comunidades indígenas de Poaló y Saquisilí, que son parte del Movimiento Indígena y Campesino de Cotopaxi (MICC). Una persona oriunda de la Jatarishun, ubicada en Saquisilí, perdió la vida. Las circunstancias de su deceso aún están por esclarecerse.
La víctima habría sido retenida por un presunto caso de justicia indígena en Poaló. Su deceso sería por “asfixia mecánica por estrangulamiento”. Los familiares exigen justicia. En ese marco personas de la Jatarishun se llevaron a otras dos personas retenidas hasta que aparezca el responsable de la muerte.
La comunidad de la parroquia Poaló se deslindó del tema y asegura que la causa de la muerte está por esclarecerse. Además, asegura que los hechos se dieron sin consentimiento del cabildo central.
Por otra parte, el MICC a través de un comunicado dio a conocer que el deceso se trata de un crimen y no de justicia indígena. Esta no es la primera vez que las comunidades se ven inmersos en estos problemas. En semanas pasadas, los familiares de una cooperativa de buses en Pujilí denunciaron públicamente que su familiar fue secuestrado.
Posteriormente, el MICC aseguró que se trató de un traslado comunitario.
Ernesto Pérez, jefe de la Policía en Cotopaxi, informó que, es una muerte violenta de asfixia por estrangulamiento. Según versiones extraoficiales, los victimarios serían dos personas. Actualmente están retenidas por comuneros. La víctima estaba retenida en la casa comunal de Maca Grande, en Poaló. Él fue trasladado hasta este lugar por una deuda.