Los moradores del barrio Pungahuito, en el cantón Salcedo, expresaron su preocupación por una obra vial que se encuentra en su etapa final de construcción, Gabriela Tonato, Abel Tonato Acuña y un grupo de vecinos acudió a la alcaldía para manifestar su inconformidad respecto a la seguridad de la estructura, solicitando medidas adicionales que garanticen la protección de sus viviendas y de la comunidad en general.
La obra, un puente y la ampliación de una vía que conecta el sector con otras zonas del cantón, ha generado inquietud entre los habitantes, según explicaron los vecinos, el diseño no contempla muros de contención, lo que podría representar un grave riesgo en caso de fuertes lluvias o desbordes de la quebrada Bellavista, la cual, aunque algunos la consideran seca, es en realidad una quebrada con flujo constante de agua.
Gabriela Tonato, una de las vecinas afectadas, relató que los moradores se acercaron al alcalde con el objetivo de solicitar la construcción de muros de contención a los costados de la vía y el puente. Explica que han visto cómo los árboles y animales son arrastrados por la quebrada, señaló, los vecinos temen que, sin estas medidas, se repita una tragedia similar a la ocurrida en Quito, en el sector de La Gasca, donde las lluvias intensas y la falta de infraestructura adecuada causaron desbordes e inundaciones.
A pesar de que la obra está casi terminada, los habitantes aseguran que no se sociabilizó con la comunidad durante su planificación, “nos dijeron que el proyecto se basaba en estudios antiguos, y que solo debían concluir la obra conforme a esos planos, no se nos consultó si la quebrada baja agua o no, y ahora estamos preocupados”, insistió en la importancia de una evaluación más exhaustiva del terreno.
Por su parte, Abel comenta que otro de los moradores, expresó su inconformidad con el diseño del puente, particularmente con el tamaño de la estructura. “La dimensión del tubo que están dejando es prácticamente una bomba de tiempo”, afirmó quien utiliza el puente a diario, explicó que el tubo de desagüe que están instalando es demasiado pequeño para manejar el caudal de agua que baja durante las lluvias intensas, lo que podría obstruir el flujo de agua con basura y escombros, provocando inundaciones.