En los cursos que más adelante nos serviría para irnos de paseo al fin de año, se formaba la directiva del curso y el presidente y el tesorero del curso eran quienes pasaban adelante a organizar las distintas acciones que se lograrían emprender durante los diez meses de clases.
Estas acciones sin darnos cuenta nos estaban dando la oportunidad de aprender los primeros pasos del ahorro y como de manera organizada podíamos lograr grandes propósitos, eran los días lunes o los días viernes donde todos los alumnos del grado debían estar haciendo el registro del pago de su cuota y el tesorero armaba un informe para saber que alumnos estaba debiendo o estaba pendiente de pago.
Este tipo de actividades que fueron suspendidas dejaron de ser practicadas en el modelo educativo por distintas circunstancias que no vienen al caso ahora analizarlas; sin embargo, nos deja marcado estas experiencias que hoy cuando ya hace años dejamos las aulas escolares, para hablar de este tema de la educación financiera.
Como a través del tiempo las nuevas generaciones no conocemos varios temas importantes que nos ayudan a tomar decisiones en la vida, hace algunos días asistíamos a un evento donde se celebraba los sesenta años de vida matrimonial de unos grandes amigos; uno de los hijos contaba como su madre desde muy pequeño mientras hacia sus labores del campo en la mañana le pedía a su hijo la lección de las tablas de multiplicar que debía repetir en voz alta todas las tablas.
Hoy le agradecía porque me ha ido bien en los negocios decía, de ahí que todas estas prácticas se han ido permitiendo en la actualidad todos estamos atentos al celular y a las redes sociales para enterarnos de las últimas novedades, es más ahora los niños ya solo preguntan a Alexa cuanto es tanto por tanto y la maquina les responde formando jóvenes dependientes de las maquinas.
Será que desde la casa estamos perdiendo estos valores o ya no estamos interesados en que las nuevas generaciones desde pequeños practique los modelos de educación financiera que se debe conocer independiente de que quieran ser de grandes, en la actualidad varias son las instituciones que ofrecen cursos de educación financiera, no solo a sus socios sino a los futuros socios, creo que se debe iniciar desde la casa, y es la labor de todos, estar bien preparados para soñar ser buenos empresarios.